Frecuencia cardíaca irregular frecuente

Fibrilación auricular

El ritmo cardíaco anormal o la arritmia son causados con mayor frecuencia por la fibrilación auricular: la fibrilación auricular afecta las dos cámaras superiores principales del corazón, y la fibrilación es el término médico utilizado para describir el "temblor" del músculo cardíaco en cuestión.

Antes de analizar más de cerca la fibrilación auricular, primero debemos entender un poco sobre la estructura del corazón para comprender mejor qué está sucediendo con esta afección y cómo la tratamos.

El corazón consta de cuatro cámaras; Como dijimos anteriormente, las dos cámaras más grandes, conocidas como las aurículas, se sientan en dos cámaras más pequeñas, conocidas como el ventrículo, y cada aurícula está conectada al ventrículo inferior. El trabajo de la aurícula es extraer sangre después de que haya pasado a través de los pulmones y luego sea rica en oxígeno y esté esperando ser liberada al resto del cuerpo. La aurícula se contrae para forzar esta sangre hacia el ventrículo inferior. El ventrículo es más pequeño que la aurícula, pero mucho más fuerte. Cuando se contrae, empuja la sangre fuera del corazón y alrededor del cuerpo bajo presión.

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Es la doble contracción de las aurículas, seguida de los ventrículos, lo que forma el latido cardíaco típico que escuchamos como un doble latido: "duh-dum".

Con a-fib, el doble latido regular se descoordina y esto significa que la sangre no se transfiere a los ventrículos cuando se pretende, la sangre literalmente pierde los latidos del corazón.

La causa real suele ser que la señal eléctrica que coordina el corazón se altera o no viaja a través del corazón como se requiere para desencadenar la contracción de los músculos. Una perturbación a menudo es causada por la señal eléctrica que se ahoga por impulsos eléctricos generados en otros lugares por las aurículas o el sistema pulmonar. Esto conduce a latidos cardíacos irregulares o latidos cardíacos irregulares, y un episodio puede tomar algunos minutos o un período de tiempo más largo, a veces años, para ser reconocido.

Afortunadamente, la fibrilación auricular generalmente no pone en peligro la vida, pero pueden aparecer varios síntomas y generalmente no son agradables: desmayos, palpitaciones, dolor en el pecho o insuficiencia cardíaca más grave. La fibrilación auricular conduce a un mayor riesgo de otras enfermedades, como accidentes cerebrovasculares debido a coágulos de sangre que se forman a partir de la sangre que se acumula en la aurícula porque no se transmite completamente al ventrículo. En general, los pacientes con fibrilación auricular tienen siete veces más probabilidades de sufrir un derrame cerebral que la población general. Sin embargo, también deben considerarse otros factores de riesgo.

El tratamiento para la fibrilación auricular incluye medicamentos que se usan para disminuir o regular los latidos del corazón, mientras que se puede usar un marcapasos para garantizar que la señal eléctrica utilizada para regular las contracciones permita contracciones coordinadas. Se puede realizar una cirugía para prevenir la recurrencia del peroné auricular, que puede ser menor (inserción de un catéter) o grave si el corazón o la producción eléctrica se dañan gravemente. Las personas con Vorhoffib a menudo son tratadas con anticoagulantes como la warfarina para reducir el riesgo de coagulación de la sangre que causa accidentes cerebrovasculares.